La curiosidad por las puertas cerradas, por los lenguajes desconocidos, por las manos sucias de oficio, por el sentir en el cuerpo eso que no sabemos.
Lo mucho que ha cambiado la educación. Soy de los ´90, empecé con los libros y los manuales, después el diskette, el CD, el casette, VHS, DVD, Internet, MP3, Pendrive, la nube y ahora IA.
De pibe era fan de la naturaleza, de los bichos y del barro, jugaba con la lupa, tuve un microscopio, me gustaba leer manuales de “Ciencias Naturales” y hacer los experimentos, me maravillaba lo visual, me estimulaba mucho y me entusiasmaba con cada imagen. Como viendo algo único y efímero: los cloroplastos, la clorofila, la fotosíntesis. EL PROCESO DE LA VEGETACIÓN ES APASIONANTE.
Era uno de esos que se leía todo, que siempre llevaba los deberes hechos, que no le gustaba faltar a la escuela. NECESITABA SABER MAS acerca de lo que me rodeaba.
La maestra de primer grado me pedía que le ayude a mis compañeros con los ejercicios de matemáticas. Acompañar un proceso educativo a los 6 años es una estimulación que ahora puedo reflexionar. Me gustaba, me hacía sentir útil.
La funcionalidad es una característica inherente al sistema. Ahora pienso en Ernesto Sábato y en ese ensayo que no recuerdo el nombre, pero me acuerdo una frase “la sociedad se olvida de quienes ya no producen”. Como si el circulo terminara ahí, creces, sos viejo, no servís más, descarte. Como el ciclo de vida de un producto.
La educación es una herramienta para la eternidad sin buscarla ni necesitar esa eternidad. La curiosidad por las puertas cerradas trae novedades de escape, es decir, aprendiendo nuevas cosas te sumergís a un entorno nuevo a través de una nueva configuración en tu cerebro.
(Vos te preguntarás: ¿esto está estudiado, es una investigación fiable del Consejo de las Ciencias de la Integridad Educativa? POR SUPUESTO QUE NO! Es una teoría que se me va ocurriendo mientras voy escribiendo estas líneas.
EDUCACIÓN: NOVEDAD EN EL ENTORNO Y EN EL CEREBRO.
Según un estudio que hice recién, de niño era mas feliz que ahora. El desafío no es volver a ser niño, sino tan feliz como en aquellos momentos.
La educación, la creatividad, las puertas nuevas y las manos sucias contribuyen a esa búsqueda. ¿ESTO ES UNIVERSAL? Claro que no, o no sé. A mi me sirve así.
Mientras mas investigo, mas aprendo, mas herramientas adquiero, mas me ensucio las manos con experimentos, me siento mas feliz, mas libre y mas capaz de conseguir lo que quiero. ¿QUE ES LO QUE QUIERO? Mas tiempo para decidir qué hacer con él.
EL TIEMPO ES MAS IMPORTANTE QUE EL DINERO, NO SON SINÓNIMOS.
El dinero podría ser parte del tiempo o una forma de darle algún tipo de mensurabilidad, sin embargo, uno no sustituye al otro.
La clave en todo este embrollo es preguntarse, sacarles el polvo a los deseos, apropiárselos, ponerlos de frente y sumergirse en conjunto: ¿Qué queremos amiguito? ¿Cómo lo conseguimos? Venga ese abrazo deseo mío.
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Con cariño
GonzaG
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